REDACCION CENTRAL,
La Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) rechazó la violencia que el Gobierno de Nicolás Maduro ejerce contra los manifestantes que desde el 30 de abril protestan en las calles, y que hasta el momento han dejado cinco muertos, más de 300 heridos y 240 personas detenidas.
"La Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal Venezolana manifiesta su preocupación por los hechos acontecidos durante las manifestaciones realizadas en el país durante los días 30 de abril al 02 de mayo de 2019, que ha dejado el lamentable saldo de 4 personas asesinadas, 240 detenidos y más de 300 heridos según el informe de la organización Foro Penal", señaló la institución en un comunicado el 2 de mayo titulado "El Señor se ha disgustado al ver que no hay justicia". El texto fue publicado antes de que se informara de la muerte de una persona más, con lo que el número de fallecidos asciende a cinco.
La comisión también rechazó "las agresiones a la libertad de prensa en la que doce trabajadores fueron víctimas de distintos tipo de violencia, cinco reporteros heridos con perdigones, una emisora robada y al menos tres medios sacados del aire".
"Al mismo tiempo condenamos el ataque violento al templo de Nuestra Señora de Fátima en Barrio Sucre de San Cristóbal, estado Táchira", agrega el comunicado, firmado por el presidente de la comisión, Mons. Roberto Lückert León; y el P. Saúl Ron Braasch, vicario general del organismo episcopal.
La Guardia Nacional Bolivariana (GNB) atacó la tarde del 1 de mayo una iglesia en la diócesis venezolana de San Cristóbal.
En un comunicado publicado ese día, Mons. Mario Moronta, Obispo de San Cristóbal, señaló que un grupo de 40 guardias quiso ingresar al templo, pero al no poder lograrlo lanzaron gas lacrimógeno al interior de la iglesia.