Coach sería multada con 45 mil euros por supuestamente ayudar a “curar la homosexualidad”

A lo que ella responde que la obligan "a probar algo que yo no he hecho. ¿Cómo puedo probar lo que no he hecho?  Yo solamente puedo mostrar lo que hago".

En ese sentido, Lorenzo declaró que en los próximos días presentará una querella "contra todas las personas" que la han atacado y amenazado, ya que según afirma está siendo víctima de "constantes ataques malintencionados" así como de "un delito de suplantación de identidad".

De esta manera Elena Lorenzo denuncia que quienes están provocando esta presión hacia ella son "quien aprobó esta ley y quien la apoya".

"Provoca violencia y odio hacia todos los que no piensan como ellos, linchamiento público y amenazas constantes de denuncias y sanciones injustas", aseguró. Por ello hizo una petición "a los políticos y responsables, de derogar la ley o algunos artículos de esta ley ideológica y totalitaria".

"Me acusan de 'curar' la homosexualidad, como si la persona homosexual fuese un enfermo", precisa y subraya que según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el Preámbulo de su Constitución se precisa que "la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades", por lo que asegura que "se puede estar ausente de enfermedad y no gozar de salud".

Además explica que según la OMS, "el goce de grado máximo de salud que se pueda lograr es uno de los derechos fundamentales de todo ser humano sin distinción de raza, religión, ideología política o condición económica o social."

Por lo que subraya que esta sanción es "ya de principio es inicua e injusta, simplemente proviene de una ley ideológica que restringe las libertades. Es una ley inicua porque es lo contrario a la equidad".

En ese sentido la coach asegura que con esta sanción, la Comunidad de Madrid pretende "restringir" su actividad como coach, "estrangular la libertad de la persona homosexual" y obligarla a "negar la ayuda a personas que la piden".

"Yo pensaba que vivía en un país moderno y democrático con amplio recorrido legislativo en cuestión de libertades, pero quizás no sea así en realidad. Con esta ley, la persona no tiene capacidad para elegir cómo quiere vivir. Ya que la única opción que tiene es la propia afirmación como gay. Si la persona no la quiere vivir así, se queda sin opciones. Esto sí está protegido, promovido e impuesto por la Comunidad de Madrid. A esto le llamo discriminación hacia la persona", subrayó.