Los obispos de Uruguay expresaron sus deseos de Pascua de Resurrección para que como Iglesia todas las personas puedan vivir la vida plena a la que invita Jesucristo y ser colaboradores de la misión que dejó.
En ese sentido, el Obispo de San José de Mayo y Presidente de la Conferencia Episcopal del Uruguay (CEU), Mons. Arturo Fajardo, manifestó que "Jesucristo se entregó por cada uno de nosotros y nos llama a vivir con Él una vida plena".
Aludiendo a su última carta pastoral titulada "Effatá-Ábrete. Hacia una Reconfiguración Pastoral", Mons. Fajardo recordó que "el Resucitado sigue curando hoy a la humanidad de múltiples maneras".
"Somos colaboradores y continuadores de esa misión. Por ello, los animo a salir al encuentro de los otros para compartir la alegría y el amor que recibimos en la Pascua, superando las diferencias que algunas veces pueden separarnos", alentó.
"Sabemos que la fuerza de la Iglesia para obrar no radica en ella misma sino en Dios. Ella ha experimentado el amor sanador del Padre y necesita siempre, como cada uno de sus miembros, que el Señor se le acerque con cariño, la toque, la sane y la vuelva a centrar en la escucha de su Palabra", reflexionó Mons. Fajardo.
A su turno, el Arzobispo de Montevideo, Cardenal Daniel Sturla, indicó que así como un faro que salva vidas y naufragios, "Cristo resucitado es la luz del mundo. Disipa todas las tinieblas: las del pecado, las de las tristezas, la de las angustias".