CIUDAD DE MÉXICO,
Este 9 de abril se cumplirá el primer año de la muerte de la hija de la reconocida líder provida Lianna Rebolledo, Jeanette, y para ella es una ocasión de agradecer todas las oraciones y la gracia de Dios que la han ayudado a salir adelante.
Jeanette falleció a los 28 años, mientras luchaba con una neurofibromatosis tipo 2, una enfermedad congénita y sin cura que causa la aparición de tumores en el sistema nervioso central, que si bien son benignos con el tiempo producen síntomas como la pérdida de la visión, el sentido auditivo y el balance, y causan convulsiones.
La joven fue concebida en una violación perpetrada por dos hombres cuando Lianna tenía solo 12 años.
En diálogo con ACI Prensa, Lianna expresó su agradecimiento "a tantas personas por su generosidad, por sus palabras de apoyo, por el simple hecho de estar ahí, pero principalmente por sus oraciones. Estoy convencida de que es la gracia de Dios y las oraciones las que me han ido sosteniendo".
La líder provida señaló que "ninguna madre está preparada para enterrar a sus hijos. Sin embargo, me tocó a mí".
"Si a mí me preguntan qué es lo peor que he vivido, ha sido la pérdida de mi hija. Pero también sé que desde donde está me ayuda a levantarme", dijo, y aseguró que "me siento con el compromiso de devolverle a toda la comunidad sus oraciones, generosidad, su apoyo".