VATICANO,
El Papa Francisco alentó a cuidar y gestionar el agua "para que no se contamine ni se pierda" con hechos concretos porque el agua "es un bien imprescindible para el equilibrio de los ecosistemas y la supervivencia humana". Así lo dijo este 22 de marzo con ocasión del Día Mundial del Agua.
En un mensaje dirigido al Director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), José Graziano da Silva, el Santo Padre recordó que el Día Mundial del Agua de este año tiene como lema: "No dejar a nadie atrás".
En esta línea, el Papa explicó que "No dejar a nadie atrás, quiere decir también tomar conciencia de la necesidad de responder con hechos concretos; no solo con el mantenimiento o perfeccionamiento de estructuras hídricas, sino también invirtiendo en futuro, educando a las nuevas generaciones para el uso y cuidado del agua".
Esta tarea de concienciación, afirmó el Pontífice, "es una prioridad en un mundo en el que todo es descartable y despreciado, y que no estima en muchos casos la importancia de los recursos que tenemos a nuestro alcance".
Por ello, el Santo Padre denunció que "cada vez son más los que sufren a causa de la falta de fuentes de agua apta para el consumo" por lo que es necesario "comprometernos para acabar con esta injusticia".
"Pido al Señor que los trabajos e iniciativas que se lleven a cabo en este Día Mundial del Agua redunden en beneficio de los que sufren por la escasez de este bien; y que, como decía san Francisco de Asís, el agua, 'que es muy útil y humilde y preciosa y casta' sirva para sustento y beneficio nuestro y de las generaciones venideras", dijo el Papa.