CIUDAD DE MÉXICO,
El P. Daniel Portillo, director del Centro de Investigación Interdisciplinar para la Protección al Menor (CEPROME) de México, advirtió sobre cinco dañinas respuestas que deben evitar obispos, superiores de comunidades religiosas y laicos al momento de afrontar las denuncias de abusos sexuales cometidas por miembros del clero.
El CEPROME es un centro de investigación y formación interdisciplinar de la Universidad Pontificia de México, que actualmente brinda cursos y diplomados sobre cómo prevenir y abordar los casos de abusos sexuales de menores en la Iglesia. Está afiliado además al Centro de Protección para la Infancia (CCP) de la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma, Italia.
Además, el CEPROME trabaja de cerca con la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) como un brazo reflexivo, de asesoría y de capacitación para sacerdotes y obispos.
En diálogo con ACI Prensa, el P. Portillo advirtió que la primera respuesta nociva de la Iglesia frente a una denuncia de abusos sería una "catatónica".
Esto, señaló, "tiene que ver con una Iglesia que, avasallada por el miedo, se congela, no sabe cómo reaccionar, no sabe qué hacer".