SANTIAGO,
La Congregación de los Sagrados Corazones en Chile emitió un comunicado en el que explicó su relación con el sacerdote Jorge Marín Pérez, exmiembro de la congregación que en 2018 fue denunciado por abuso.
El 9 de marzo, la Arquidiócesis de La Serena informó que la investigación previa en contra del P. Marín "determinó la verosimilitud de la denuncia" de abusos en hechos que "conciernen a personas mayores de edad en condiciones de vulnerabilidad".
Acto seguido, se dio inicio un proceso administrativo penal en contra de Marín, quien quedó suspendido de manera cautelar del ejercicio público del ministerio sacerdotal.
En su comunicado del 14 de marzo, la Congregación de los Sagrados Corazones en Chile aclaró su relación con el acusado, ordenado sacerdote de esa congregación en 1987.
"En enero de 2009, dejó la congregación a través de un permiso de ausencia, aduciendo una crisis personal y comunitaria. Sin embargo, mantenía su intención de seguir siendo sacerdote formando eventualmente parte del clero diocesano en alguna diócesis de Chile", explicó la institución.
Además, desde 2011 Marín "estuvo en proceso de 'incardinación ad experimentum' –o a prueba- en la Arquidiócesis de La Serena, donde finalmente fue incardinado o integrado, en noviembre de 2016".