VATICANO,
El Papa Francisco advirtió a los cristianos, durante el rezo del Ángelus este domingo 10 de marzo en el Vaticano, de los peligros de dialogar con el diablo: "Con el diablo no se dialoga".
Durante su enseñanza, el Santo Padre recurrió al Evangelio de este primer domingo de Cuaresma, en el que se "narra la experiencia de las tentaciones de Jesús en el desierto. Después de haber ayunado durante cuarenta días, Jesús es tentado en tres ocasiones por el diablo".
Sin embargo, "Jesús al responder al tentador, no entra en diálogo, sino que responde a los tres desafíos con la palabra de Dios. Esto nos enseña que con el diablo no se dialoga, no se puede dialogar, sólo responder con la palabra de Dios".
En primer lugar, el diablo invita a Jesús "a transformar una piedra en pan; luego le muestra desde lo alto los reinos de la tierra y le promete convertirse en un mesías poderoso y glorioso; por último, lo conduce hacia el lugar más alto del templo de Jerusalén y lo invita a lanzarse al vacío para manifestar de forma espectacular su poder divino".
El Papa explicó que "las tres tentaciones indican tres caminos que el mundo siempre propone prometiendo grandes triunfos: la codicia de posesiones, la gloria humana, la instrumentalización de Dios. Son tres caminos que nos perderán".
La primera tentación, "el camino de la codicia de posesiones. Consiste en esa lógica insidiosa del diablo. Se aprovecha de la natural y legítima necesidad de nutrirse, de vivir, de realizarse, de ser feliz, para empujarnos luego a cree que todo es posible sin Dios, incluso, contra Él".