CAMBERRA,
Tras las noticias de la condena por abuso sexual de menores del Cardenal George Pell, varios obispos en Australia aseguran estar comprometidos con la verdad y la justicia, al tiempo que se niegan a hacer comentarios hasta que haya concluido la apelación del Purpurado.
El Arzobispo de Sydney, Mons. Anthony Fisher, recomendó a los católicos que no sean "demasiado rápidos al juzgar la situación".
Durante una Misa en la Basílica de Santa María de Sydney el 3 de marzo, el Prelado dijo que los católicos de todo el país han sido sacudidos, vencidos intempestivamente y desmoralizados por las noticias de la condena del Cardenal Pell.
Asimismo, tras enfatizar en el daño que el abuso puede causar en las víctimas y en la credibilidad de la Iglesia, Mons. Fisher dijo que no discutirá el contenido de los cargos o el veredicto.
"El proceso legal con respecto al Cardenal aún no está completo, por lo que no comentaré. Insto a la gente a no sacar conclusiones finales hasta que los jueces de apelación hayan tenido la oportunidad de revisar este asunto. En medio de las acaloradas emociones del presente, también rezo por la calma pública y el civismo", expresó.
Mons. Fisher señaló que "algunos han planteado preguntas serias para que la corte de apelaciones las examine". "Si somos demasiado rápidos para juzgar, podemos terminar uniéndonos a los demonizadores o los apologistas, aquellos que buscan sangre o aquellos que lo niegan".