MADRID,
El P. Ángel Fernández Artime, Superior de la Congregación de los Salesianos envió una carta a toda la familia salesiana en el mundo explicando que había conocido al P. César Fernández, asesinado el 15 de febrero en Burkina Faso, y era "un hombre de Dios" y con su muerte se ha sumado a "otros tantos mártires de la Iglesia".
El P. Ángel Fernández Artime envió una carta a la Familia Salesiana en el mundo después de la "dolorosísima noticia" de la muerte del hermano Antonio César Fernández, misionero en África desde 1982.
El P. Fernández Artime aseguró que "muchos días en el año" recibe la noticia del fallecimiento "por causas naturales de hermanos salesianos. Es la ley de la vida, y también nos llegará a nosotros. Pero cuando es así, aún con el dolor de la pérdida, damos gracias al Señor por tantas hermosas vidas generosamente entregadas en el servicio a los demás".
Sin embargo, explicó que al hermano Antonio César "le han robado la vida, se la han quitado sin ningún motivo".
Era un "hombre bueno y hombre de Dios que, como el Señor, pasó por la vida 'haciendo el bien', especialmente entre su amado pueblo africano", precisó, y recordó que hacía pocos meses se había encontrado con él en Burkina Faso, precisamente en su comunidad en Ouagadougou, donde era director y párroco.
Según explica el superior, "Antonio César se suma a otros tantos mártires de la Iglesia de hoy en el mundo, algunos de ellos salesianos y miembros de nuestra Familia Salesiana".