CIUDAD DE MÉXICO,
En medio de toda la violencia y represión que sufre Nicaragua en estos días "es una alegría padecer con el pueblo", aseguró el Obispo de Granada, Mons. Jorge Solórzano Pérez, a su paso por México del 12 al 16 de febrero para participar en la segunda Noche de los Testigos de Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN).
Desde el 18 de abril de 2018 una serie de manifestaciones contra reformas a las pensiones y otras prestaciones sociales decantaron en enfrentamientos entre el Gobierno del presidente Daniel Ortega y grupos opositores.
Se estima que más de 500 personas han muerto, en medio de la violenta represión ejercida por el régimen.
En julio de 2018 un grupo paramilitar afín al Gobierno de Ortega atacó a sacerdotes y obispos, entre los que se encontraban el Arzobispo de Managua, Cardenal Leopoldo José Brenes; el Obispo Auxiliar de Managua, Mons. Silvio José Báez; y el Nuncio Apostólico en Nicaragua, Mons. Waldemar Somertag.
En diálogo con ACI Prensa, Mons. Solórzano Pérez reconoció que "lleva sus costos estar con el pueblo, pero creemos que esa es la misión y ese es el mejor camino, no pensamos cambiar".
"Ahora que están sufriendo mucho de pobreza, de ataques, muchas veces nos queda solamente acompañarles en su sufrimiento, en su dolor. Estoy convencido de que esa es la misión del obispo y todos los obispos estamos en esa línea, de estar acompañando a la gente aunque suframos lo mismo que sufre el pueblo", dijo.