VATICANO,
El Papa Francisco pidió reafirmar "con constancia y determinación el valor principal de la justicia indispensable para el correcto funcionamiento de cada ámbito de la vida pública y para que todos puedan llevar una vida serena".
Así lo indicó, durante una audiencia este sábado 9 de febrero concedida a la Asociación Nacional de Magistrados realizada en la Sala del Consistorio del Vaticano con ocasión del 110º aniversario de fundación.
Durante su discurso, el Santo Padre se refirió a este aniversario como "una ocasión de agradecimiento y de balance, un momento en que reafirmar sus propósitos y recalibrar los objetivos, a la luz de un contexto que ha cambiado".
"Desde hace más de un siglo, a través de iniciativas de carácter cultural, de asistencia y previsión, la Asociación Nacional de Magistrados supervisa el correcto funcionamiento de la delicada y preciosa función del magistrado. Al mismo tiempo, cumple la importante tarea de vigilancia de las normas democráticas y de promoción de los valores constitucionales, al servicio del bien común", explicó el Papa.
Sin embargo, el Pontífice alertó que "vivimos en un contexto atravesado por tensiones y laceraciones, que pueden debilitar la consistencia misma del tejido social y diluir la conciencia cívica de muchos, con un repliegue hacia lo privado que a menudo genera desinterés y se convierte en caldo de cultivo de la ilegalidad".
En esta línea, el Papa Francisco pidió "reafirmar con constancia y determinación, con las actitudes y la praxis, el valor principal de la justicia, indispensable para el correcto funcionamiento de cada ámbito de la vida pública y para que todos puedan llevar una vida serena".