El Arzobispo de Panamá y presidente del Comité Organizador Local de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), Mons. José Domingo Ulloa, destacó el éxito del evento concluido ayer y señaló que ahora el reto de la Iglesia es capitalizar el potencial evangelizador de los jóvenes.
Un día después de finalizada la Jornada Mundial de la Juventud Panamá 2019 el Comité Organizador Local (COL) realizó un balance positivo y esperanzador del encuentro.
A mediados de enero comenzaron a llegar las distintas delegaciones de 156 países del mundo a Panamá y Costa Rica para participar en la Pre Jornada o Días de Diócesis.
El 22 de enero comenzó formalmente la JMJ, alcanzando la participación de más de 700 mil personas el 27 de enero, día de la Misa de Clausura.
A través de un comunicado, se informó que Mons. José Domingo Ulloa destacó la alegría de los panameños y los retos superados en el ámbito logístico.
El Arzobispo agradeció al pueblo panameño por el compromiso, así como al Gobierno y a los distintos estamentos comprometidos para alcanzar el éxito del evento juvenil. También se destacó el papel de los tres mil comunicadores acreditados que "hicieron llegar la buena nueva a todo el orbe desde esta capital mundial de la juventud".