REDACCION CENTRAL,
Los obispos de Panamá recibieron al Papa Francisco en el Aeropuerto Internacional de Tocumen vestidos de blanco, un color que se reserva usualmente al Pontífice y por ello ha causado curiosidad entre los fieles.
En la bienvenida que ofrecieron al Santo Padre, todos los obispos presentes, entre los que estaban el Arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa; y el Nuncio Apostólico, Mons. Mirosław Adamczyk, estaban vestidos de blanco.
Los miembros del clero generalmente visten una sotana negra, mientras que los botones, el fajín y el solideo –el pequeño gorro que usan sobre la cabeza– son del color asignado a su rango eclesiástico: los cardenales en color púrpura, los obispos en morado y los sacerdotes en negro.
Las vestiduras blancas en su totalidad se reservan para el Pontífice.
Sin embargo, los clérigos pueden hacer una excepción si se encuentran en "Tierra de Misión" o en zonas tropicales muy cálidas, donde el color blanco ayuda a soportar las altas temperaturas.
Se considera Tierra de Misión a los lugares donde se necesitan misioneros y misioneras en acción y cuya evangelización precisa de un cuidado especial por parte de la Pontificia Congregación para la Evangelización de los Pueblos.