VATICANO,
El Prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, Cardenal Peter Kodwo Appiah Turkson, insistió en que "es necesario que el derecho fundamental a la paz y al desarrollo integral se reconozcan y garanticen adecuadamente".
Así lo indicó en la apertura de la Conferencia Internacional "Los derechos humanos en el mundo contemporáneo: conquistas, omisiones, negaciones" que se lleva a cabo en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma el 10 y 11 de diciembre.
El Dicasterio, junto a esta casa de estudios, decidió organizar este Congreso con motivo del aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (París, 10 de diciembre de 1948) y de la Declaración y del Programa de Acción de Viena (Viena, 25 de junio de 1993), de los cuales se celebran el 70 y el 25 aniversario respectivamente.
A través de esta iniciativa, el Prefecto explicó que el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral "desea no solo reafirmar el valor de los derechos humanos y su centralidad en la misión que le encomendó el Santo Padre, sino sobre todo cuestionar el estado de los derechos humanos en las sociedades contemporáneas y explorar algunas nuevas de cara a una mayor concientización y protección de la dignidad humana hoy".
En su discurso, el Cardenal Turkson insistió en que "es un deber preguntarse qué ha pasado con la esperanza de ver estos derechos realizados para todos los seres humanos" porque afirmó que "es lamentable observar que el ideal propuesto por los documentos en cuestión parece a veces vacilar bajo el peso de interpretaciones controvertidas, politización excesiva y numerosos incumplimientos", dijo.
En este sentido, el prelado reiteró que "a pesar de las solemnes proclamaciones y las expectativas generadas por ellas, se han producido nuevas violaciones de la dignidad humana, mientras que han reaparecido viejas heridas y otras, como en el caso de la esclavitud, han asumido rostros diferentes".