Los obispos de Estados Unidos aseguraron sus oraciones por las víctimas y heridos del tiroteo ocurrido hoy en la sinagoga Tree of Life (Árbol de la Vida) en Pittsburgh, estado de Pensilvania.
Un hombre ingresó esta mañana a la sinagoga y comenzó a disparar para luego intentar huir, matando a al menos ocho personas e hiriendo a varios más, entre asistentes al templo judío y autoridades policiales. Según la prensa local, el asesino gritó "todos los judíos deben morir" mientras disparaba.
Las autoridades lograron detener al atacante y lo tienen en custodia.
El Cardenal Daniel DiNardo, Arzobispo de Galveston-Houston y presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), aseguró "a nuestros hermanos y hermanas de la comunidad judía, estamos con ustedes".
"Condenamos todos los actos de violencia y odio y una vez más, llamamos a nuestra nación y a las autoridades públicas a enfrentar la plaga de la violencia armada".
El Cardenal DiNardo subrayó que "la violencia como una respuesta a diferencias políticas, raciales o religiosas debe ser enfrentada con todo esfuerzo posible".