CIUDAD DE MÉXICO,
Los obispos de San Cristóbal de las Casas y Tapachula, al sur de México, aseguraron sus esfuerzos para dar acogida a la caravana de miles de migrantes que llega desde Honduras rumbo a Estados Unidos.
El 13 de octubre partió de San Pedro Sula, Honduras, una caravana de migrantes que superó las 2.000 personas al llegar a la frontera sur de México, tras cruzar Guatemala.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha exigido a Honduras, Guatemala y El Salvador detener la caravana de migrantes, amenazando con retirar ayudas financieras. En una reciente publicación en Twitter, Trump dijo que si México no era capaz de "detener este embate", se verá obligado a "cerrar nuestra frontera sur".
En un mensaje publicado el 18 de octubre, Mons. Rodrigo Aguilar Martínez, Obispo de San Cristóbal de las Casas en el estado de Chiapas, aseguró que la Iglesia se solidariza con los migrantes, que son "rostros sufrientes de Cristo hoy".
"Nuestros hermanos hondureños viven un momento de aguda crisis en problemas de pobreza, inseguridad, desempleo y corrupción, ante esto debemos recordar que las personas migrantes no son criminales", señaló, y aseguró que "migran porque buscan la vida y el bienestar al que todas y todos tenemos derecho".
El prelado mexicano exigió que los gobiernos "asuman su responsabilidad de garantizar los derechos fundamentales de las personas migrantes", al tiempo que alentó a los fieles de San Cristóbal de las Casas a "abrir sus corazones y sus hogares para acogerles con amor y hospitalidad".