CIUDAD DE MÉXICO,
El clericalismo, tantas veces denunciado por el Papa Francisco, estaría en la raíz del encubrimiento de abusos sexuales en la Iglesia; así lo señaló el P. Hugo Valdemar, exvocero de la Arquidiócesis Primada de México y actual canónigo penitenciario.
En una reciente columna publicada en el diario mexicano ContraRéplica, titulada "Las causas del delito", el P. Valdemar subrayó que "el abuso a menores por parte de sacerdotes es un delito, así lo estipulan las leyes civiles y también las eclesiásticas, amén que desde el ámbito moral de la fe católica es un grave pecado que atenta contra el sexto mandamiento de no fornicar ni cometer actos impuros".
"Además de estas agravantes resulta una acción patológica y monstruosa que acarrea a las víctimas sufrimientos y traumas que quedan de por vida y lastiman en lo más profundo su propia fe y ponen en entredicho su pertenencia a la Iglesia".
El sacerdote mexicano recordó que en una carta publicada el 20 de agosto de este año, el Papa Francisco aseguró que "decir no al abuso es decir enérgicamente no a cualquier forma de clericalismo".
"¿Pero a qué se refiere el Papa con este término? Sin duda que en primer lugar al abuso de poder de quien por tener el carácter de obispo o sacerdote, se sitúa por encima de sus feligreses, se reviste de autoritarismo, se siente intocable y poseedor de un fuero que lo hace inmune, y busca ante todo salvaguardar el prestigio de la institución", señaló.
Aquel que cae en el clericalismo, prosiguió, asume ante las víctimas "un papel de desprecio e incluso de amenaza, lo cual es del todo inaceptable, pues contradice el evangelio de Jesús, que dijo bien claro a sus discípulos: el que quiera ser el mayor entre ustedes que sea el servidor de todos".