NUEVA YORK,
Mons. Paul Richard Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados y Jefe de la Delegación de la Santa Sede ante Naciones Unidas, presentó tres elementos para que los Estados de Medio Oriente protejan a las minorías religiosas de la persecución y la discriminación.
En su discurso, pronunciado en Nueva York este 28 de septiembre en el marco del 73° período de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas, Mons. Gallagher lamentó que las "antiguas comunidades cristianas (minorías) sufran en la región del nacimiento del cristianismo".
"La población cristiana en Oriente Medio ha disminuido drásticamente en los últimos años y, en algunos lugares, puede no sobrevivir, sin importar cuán profundas sean sus raíces. Los cristianos siempre han coexistido con los musulmanes y han sido parte del tejido de Oriente Medio. Tal hecho, evidente por sí mismo, sirve para recordar al mundo una vez más que los cristianos tienen todo el derecho de vivir en paz y libertad", explicó.
Para lograr una verdadera "protección" a las minorías, no solamente religiosas, Mons. Gallagher mencionó tres elementos que cree "esenciales" en los "esfuerzos a largo plazo para abordar las causas fundamentales de la persecución y la discriminación".
1. Respeto del estado de derecho
"En primer lugar, creo que la clave para proteger a las minorías religiosas o étnicas de la persecución es el pleno respeto del estado de derecho y la plena igualdad de todos ante la ley basada en el principio de ciudadanía, independientemente de las diferencias religiosas, raciales o étnicas", explicó la autoridad vaticana.