Las pastorales en Bolivia, Argentina y Chile se han organizado para festejar el "Día del Migrante y Refugiado" el 2 de septiembre bajo los lineamientos propuestos por el Papa Francisco de "acoger, proteger, promover e integrar"
Las jornadas en cada uno de estos países buscan ser un espacio de encuentro, valoración y sensibilización ante el fenómeno de la movilidad humana y frente a la cual nadie puede permanecer indiferente.
Argentina
En Argentina las comunidades de migrantes realizarán talleres de reflexión y celebraciones para conmemorar el día.
En tanto, la Comisión Episcopal de Pastoral de Migrantes e Itinerantes ha propuesto un subsidio litúrgico para que cada comunidad celebre esta jornada especial.
Mons. Hugo Salaberry, Obispo de Azul y presidente de la comisión episcopal manifestó que "cada forastero que llama a nuestra puerta es una ocasión de encuentro con Jesucristo, que se identifica con el extranjero acogido o rechazado en cualquier época de la historia".
"Expresamos nuestra cercanía y adhesión a todos y cada uno de los migrantes y refugiados que han venido en busca de un futuro mejor, comprometiéndonos para que puedan encontrar corazones solidarios e integradores, sin egoísmos ni indiferencias, que los reciban como hermanos en el Pueblo de Dios que peregrina en la Argentina", agregó.