El 7 de agosto la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados de Chile aprobó la idea de legislar el proyecto de la eutanasia, con siete parlamentarios a favor, cuatro en contra y una abstención.
Fue ingresado en octubre de 2014 y tiene como objetivo "permitir la eutanasia haciendo efectiva la autonomía de las personas en caso de enfermedades terminales". Ahora pasará a ser debatido en otras comisiones.
El documento establece que la eutanasia podrá ser solicitada por "la persona que ha sido diagnosticada en estado de salud terminal" o de "sufrimiento físico o mental constante e insoportable que no puede ser apaciguado" por la medicina "y que resulta de una lesión o condición patológica incurable".
Uno de los autores de la iniciativa, el diputado Vlado Mirosevic, dijo que su proyecto es una "legislación razonable, democrática, civilizatoria y humanitaria".
Sin embargo, el diputado Jaime Bellolio, del partido Unión Demócrata Independiente, advirtió que el proyecto "no tiene ningún tipo de restricción para saber qué es lo que ocurre si hay una eutanasia en otra causal" y que "despenaliza también el suicidio asistido".
El diputado señaló que el proyecto no menciona los cuidados paliativos ni establece la objeción de conciencia. "Es decir, ¿por qué podríamos creer que es exclusivamente a través de dos causales cuando el argumento que se ha esgrimido es el de la autonomía de la voluntad exclusiva?", cuestionó Bellolio.