En medio del debate público sobre qué se puede hacer para proteger a los niños del abuso sexual, los estudios vienen demostrando que una estructura familiar inestable puede ser un factor de riesgo.
Al observar las tendencias generales sobre el abuso infantil, el Dr. William Bradford Wilcox, director del National Marriage Project de la Universidad de Virginia (Estados Unidos), dijo a CNA –agencia en inglés del Grupo ACI– que los estudios muestran que los niños que provienen de hogares inestables con padres solteros son más propensos a ser abusados, especialmente por alguien cercano a ellos.
"El drama y caos familiar son caldo de cultivo para el abuso. Los niños que están expuestos a la inestabilidad tienen más probabilidades de estar expuestos a adultos con los que no tienen relación de parentesco, especialmente varones adultos sin relación de parentesco", dijo Wilcox.
Los niños en situaciones familiares caóticas también tienen más probabilidades de estar angustiados emocionalmente, una vulnerabilidad de la que los abusadores adultos probablemente se aprovechen, dijo Wilcox.
Un estudio federal publicado en 2011 mostró que los niños que viven con su madre biológica y su novio -sin relación de parentesco con el menor- tenían 11 veces más probabilidades de ser abusados sexual, física o emocionalmente y seis veces más probabilidades de ser niños desatendidos en comparación a los que viven con sus padres biológicos casados.
"En otras palabras, uno de los lugares más peligrosos para que un niño en Estados Unidos se encuentre, es un hogar que incluye un novio varón sin relación de parentesco, especialmente cuando ese novio se queda solo para cuidar de un niño", escribió Wilcox cuando el estudio fue lanzado en 2011.