VATICANO,
Con el inicio de agosto, el Papa Francisco retomó la Audiencia General de los miércoles tras la pausa estival y dedicó su catequesis a los ídolos, sobre los que afirmó que, al contrario de lo que muchos piensan, "quitan la vida", así como el dinero "roba" y el "placer" lleva a la soledad.
En el encuentro, que se celebró en el Aula Pablo VI del Vaticano, el Pontífice dijo que adorar a los ídolos es "una tendencia humana, que no dejan de lado ni creyentes ni ateos".
El Papa señaló que "los ídolos esclavizan, prometen felicidad, pero no la dan; y uno se encuentra viviendo por esa cosa o esa visión en un torbellino autodestructivo, en espera de un resultado que no llega nunca".
"El dinero roba la vida y el placer lleva a la soledad. Las estructuras económicas sacrifican vidas humanas para utilidades mayores. Se vive en la hipocresía, haciendo y diciendo lo que los demás esperan, porque el Dios de la propia afirmación lo impone".
"Y se estropean vidas, –continuó diciendo Francisco–, se destruyen familias y se abandonan jóvenes en mano de modelos destructivos".
El Papa alertó de que "los ídolos prometen vida, pero en realidad la quitan. El Dios verdadero no pide la vida, sino que la dona. El Dios verdadero no ofrece una proyección de nuestro éxito, sino que enseña a amar. El amor verdadero no pide hijos, sino que dona a su Hijo por nosotros".