En la víspera de la fiesta de San Ignacio de Loyola, que la Iglesia Católica celebra cada 31 de julio, te traemos algunos datos sobre la vida y obra del fundador de los Jesuitas y creador de los ejercicios espirituales.
1. Fue parte de la nobleza
Ignacio nació en el castillo de Loyola, en Guipúzcoa, municipio ubicado al norte de España. Lo bautizaron con el nombre de Iñigo de Loyola, y luego de realizar sus estudios en París (Francia), tomó el nombre de “Ignacio”. Los padres del santo pertenecían a antiguas familias nobles del País Vasco.
2. Antes de su conversión, tuvo una vida libertina
En el contexto de la situación sociopolítica sumamente violenta que reinaba en el País Vasco en el siglo XVI, y al igual que algunos nobles de la época, Ignacio era conflictivo, violento y vivía una sexualidad irresponsable.
Antes de convertirse al catolicismo, el santo era un soldado español con antecedentes policiales relacionados a peleas nocturnas.