ROMA,
El Patriarca Caldeo de Babilonia Louis Rafael Sako, recientemente creado cardenal por el Papa Francisco, envió una carta abierta al pueblo iraquí destacando que su nueva responsabilidad es una respuesta al martirio que ha sufrido su país.
En la misiva publicada este 20 de julio en el sitio web del Patriarcado Caldeo de Babilonia, el Purpurado afirmó que "la vestimenta y sombrero rojo de un cardenal representan el martirio, y particularmente en nuestro país, esto ha sido 'probado' en más de una ocasión'".
"Definitivamente simboliza la sangre de tantos mártires que han sido derramada en esta tierra desde todos los componentes de la sociedad iraquí. Sin embargo, el rojo también es un símbolo de amor, que debe inflamar el corazón de la persona que lo usa, ofreciendo así su vida por los que ama incondicionalmente", destacó.
El Cardenal Sako aseguró que "esta misión significa servir a mi país devastado y de servir a todos sin excepción, así como lo hace el Papa Francisco en el mundo".
"Me doy cuenta de que ser un cardenal significa asumir más responsabilidades hacia la Iglesia Universal. Al mismo tiempo, me da apoyo, impulso y un espacio más amplio para servir. Así podré unirme a todas aquellas personas que tengan la buena voluntad para alcanzar los objetivos comunes que estamos buscando", prosiguió.
El Patriarca Caldeo de Babilonia indicó que regresa a Irak "lleno de alegría y hermosos sentimientos" tras haber sido creado cardenal por el Papa Francisco el pasado 28 de junio y participar el 7 de julio en el encuentro del Pontífice con los Patriarcas y jefes de las Iglesias Orientales, Católicas y Ortodoxas en Bari.