BARI,
El Papa Francisco reclamó a los poderes financieros y políticos el fin de los abusos sobre las tierras y pueblos de Oriente Medio para la obtención de beneficios egoístas que benefician a unos pocos en detrimento de los más pobres: "¡Basta de usar a Oriente Medio para obtener beneficios ajenos a Oriente Medio!", clamó.
Al finalizar la oración conjunta en el paseo marítimo de Bari, Italia, para pedir por la paz en Oriente Medio, este sábado 7 de julio, el Papa Francisco mantuvo con los Patriarcas y jefes de las Iglesias Orientales, Católicas y Ortodoxas, una reunión a puerta cerrada en la Basílica de San Nicolás.
Antes de abandonar la Basílica, el Pontífice pronunció algunas palabras a modo de conclusión. En ellas, Francisco denunció la sangría que afecta a Oriente Medio desde hace años y aseguró que "la paz no vendrá gracias a las treguas sostenidas por muros y pruebas de fuerza, sino por la voluntad real de escuchar y dialogar".
El Santo Padre señaló la responsabilidad de los diferentes poderes que actúan en esas tierras para poner fin a la violencia y al enfrentamiento de la población. "Para ello es esencial que quien tiene el poder se ponga decidida y sin más dilaciones al servicio verdadero de la paz y no al de los propios intereses".
El Papa exclamó: "¡Basta del beneficio de unos pocos a costa de la piel de muchos! ¡Basta de las ocupaciones de las tierras que desgarran a los pueblos! ¡Basta con el prevalecer de las verdades parciales a costa de las esperanzas de la gente! ¡Basta de usar a Oriente Medio para obtener beneficios ajenos a Oriente Medio!".
"La guerra es la plaga que trágicamente asalta esta amada región. Quien lo sufre es sobre todo la gente pobre. Pensemos en la martirizada Siria. La guerra es hija del poder y la pobreza. Se vence renunciando a la lógica de la supremacía y erradicando la miseria".