CIUDAD DE MÉXICO,
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) elevó su oración por las 24 víctimas de las explosiones de los talleres de pirotecnia en la localidad de Tultepec, y pidieron que se implementen mayores medidas de seguridad.
En un comunicado publicado este 6 de julio, los obispos mexicanos manifestaron "nuestras más sentidas condolencias a los familiares de las veinticuatro personas que han perdido la vida, y nuestra cercanía con todos aquellos que resultaron heridos".
Poco antes de las 10:00 a.m. del 5 de julio, cuatro explosiones sacudieron Tultepec. Las autoridades indicaron que 24 personas fallecieron y más de medio centenar resultaron heridas.
De acuerdo a la prensa local, entre los fallecidos se encuentran un agente de protección civil, cuatro bomberos, un policía estatal, un policía municipal y un menor de edad.
Tultepec, a hora y media de la capital del país, es conocida como "la capital de la pirotecnia" de México. La mayoría del trabajo se realiza de forma artesanal, sin mayores medidas de seguridad.