MADRID,
El pasado martes 26 de junio, el Pleno del Congreso de los Diputados aprobó con el único voto en contra del Partido Popular (PP), la tramitación de la propuesta de ley del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) para regular la eutanasia.
El PSOE propone que la eutanasia se incluya como una prestación más en el sistema nacional de salud, y debería ser el propio paciente quien pida este procedimiento según sus "valores vitales".
Solo se puede aplicar cuando el paciente sufre "una enfermedad grave e incurable o discapacidad grave y crónica". También contempla la objeción de conciencia y la creación de una comisión de control "de todo el proceso".
Una vez solicitada la eutanasia, el enfermo debe ser informado por dos médicos que también darán su parecer sobre la situación del paciente. Posteriormente pasará por varias comisiones de seguimiento, quienes tendrán la última palabra.
En total, el proceso no durará más de 32 días desde la petición hasta la resolución final.
La proposición de ley sólo fue rechazada por el PP, que advirtió que esto significa reconocer la derrota profesional, política, médica y social ante los enfermos.