BOGOTÁ,
La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) se pronunció luego de que regresara a la cárcel el exguerrillero de las FARC, Jesús Santrich, acusado por narcotráfico y que fue acogido en la sede de una fundación vinculada a la Iglesia por un "asunto humanitario".
En un comunicado publicado el domingo en el sitio web de la CEC, se recordó que "el sábado 2 de junio de 2018, el señor Zeuxis Pausias Hernández Solarte, alias Jesús Santrich, fue trasladado de la sede de la Fundación Caminos de Libertad a la cárcel La Picota".
Con esto "se cumplió lo acordado el pasado 10 de mayo: como un gesto humanitario, en consonancia con la misión que le es propia y sin perjuicio de los procesos judiciales nacionales o internacionales a los que el Sr. Santrich se encuentra vinculado, la Fundación Caminos de Libertad lo acogió en su sede, con el propósito de que recuperara su salud", indica el texto.
"Una vez que el Instituto de Medicina Legal certificó que, tras haber cesado la huelga de hambre y recibido la necesaria atención médica, el Sr. Santrich presenta buenas condiciones de salud, el Ministerio de Justicia y el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) procedieron a trasladarlo a la cárcel La Picota, donde seguirá a disposición de las autoridades", señala el comunicado.
El exguerrillero fue detenido en Bogotá el 9 de abril de 2018, luego de una orden de la Interpol a pedido de la justicia de Estados Unidos, que solicita su extradición al acusarlo de traficar 10 toneladas de cocaína de la mano del cártel mexicano de Sinaloa.
Santrich, integrante del Estado Mayor de las FARC, fue uno de los delegados del grupo narcoterrorista para el diálogo que llevó a los acuerdos de paz en La Habana (Cuba), con el Gobierno colombiano.