MADRID,
El nuevo presidente de gobierno de España, Pedro Sánchez, prometió el cargo hoy frente a la Constitución y junto al rey Felipe VI pero sin crucifijo ni Biblia, algo sin precedentes en la historia democrática moderna del país.
La decisión de Sánchez, permitida desde 2014, en que asumió como nuevo rey Felipe VI, causó polémica en las redes.
Mientras que algunos felicitaron que Sánchez no juramentara ante símbolos religiosos por ser España un estado aconfesional, otros señalaron la incoherencia del nuevo presidente español que ha llegado a saludar el Ramadán islámico.
"Pedro Sánchez promete su cargo sin la biblia, pero sí con apoyo de populistas de Villa tinaja, golpistas y terroristas", escribió el usuario Daniel Sanz en Twitter.
"¿No habrá querido jurar el cargo Pedro Sánchez con Biblia y crucifijo para no cometer pecado de perjurio?", cuestionó el usuario Rafael Gaidovar.
Gabriel Rubio dijo a su turno que "yo le agradezco a Pedro Sánchez el gesto de no jurar en falso sobre la Biblia".