ROMA,
A un mes de la muerte de Alfie Evans, el hospital Bambino Gesù del Vaticano emitió una nueva carta de 10 artículos sobre los "derechos del niño incurable", que define facultades básicas para padres e hijos que atraviesan esta difícil situación.
Entre otras cosas, la carta que aplicará el hospital recuerda que los niños con enfermedades terminales tienen derecho a una segunda opinión, un mejor diagnóstico y cuidados paliativos, así como el derecho a mejores tratamientos experimentales y a transitar a través de las fronteras internacionales.
El decálogo fue presentado el 29 de mayo como parte del seminario "¿Hay niños incurables?", evento organizado por el también llamado hospital del Papa.
El evento se realizó un mes después de la muerte de Alfie Evans, el niño de casi 2 años que falleció luego que un hospital de Liverpool, Inglaterra, le retirara el soporte vital pese a la oposición de sus padres, tras una intensa batalla legal.
El nuevo estatuto del hospital se basa en las cartas nacionales e internacionales anteriores sobre los derechos de los niños hospitalizados, y afirma que la atención médica adecuada no implica solo buscar una cura, sino ofrecer cuidados paliativos, y apoyo espiritual y psicológico para la familia.
Un resumen publicado en el sitio web del hospital Bambino Gesù alude tanto al caso de Alfie Evans, como al del bebé británico Charlie Gard, quien murió a los 11 meses de edad en 2017 después de una batalla legal similar sobre su tratamiento y traslado.