ROMA,
El Patriarcado Caldeo de Babilonia anunció el 12 de mayo que la Santa Sede dio "Nihil Obstat" (Nada impide), para iniciar la causa de beatificación del P. Ragheed Ganni y otros tres diáconos que fueron asesinados por extremistas musulmanes en una iglesia de Irak en 2007.
Por medio de una carta con fecha 1 de marzo de 2018, el Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, Cardenal Angelo Amato; y el secretario de este dicasterio, Mons. Marcello Bartolucci, afirmaron que luego de estudiar los informes correspondientes, "no hay ningún obstáculo para la beatificación y la declaración de los servidores de Dios: Padre Ragheed Aziz Ganni, sacerdote de la Archieparquía de Mosul; y sus tres diáconos".
Los tres diáconos son Hanna Esho, Ghassan Essam Bideauiv y Basman Yousef Daoud.
La carta indica que el pedido para abrir la causa fue hecha el 4 de noviembre de 2017 por el Obispo de la Eparquía Caldea de Santo Tomás Apóstol en Detroit (Estados Unidos), Mons. Frank Yohana Kalabat.
La agencia vaticana Fides explicó que "con las autorizaciones necesarias de la Santa Sede, la competencia de la causa" fue transferida a la Eparquía Caldea de Santo Tomás Apóstol en Detroit, debido a la "inestabilidad de las regiones norte-iraquíes y la difícil situación en que se encuentra la Archieparquía caldea de Mosul después de los años de ocupación yihadista".
Los terroristas del Estado Islámico fueron expulsados de Mosul en julio de 2017, luego de haber permanecido en la ciudad tres años, y esta circunstancia hacía "difícil llevar a cabo un proceso de canonización en el lugar, respetando los procedimientos requeridos, incluso en lo que respecta a la recogida de testimonios".