VATICANO,
En sus palabras previas al rezo del Regina Coeli, el Papa Francisco afirmó que para ser santos no es necesario ser obispo, sacerdote o religioso, sino vivir toda actividad, grande o pequeña, en unión con Jesús y con actitud de amor y servicio al prójimo.
"Para ser santos 'no es necesario ser obispos, sacerdotes, religiosos o religiosas (…). Todos nosotros, todos, somos llamados a ser santos viviendo con amor y ofreciendo cada uno su propio testimonio en las ocupaciones de cada día, ahí donde se encuentra'", afirmó, citando pasajes de su exhortación apostólica Gaudete et exsultate.
En ese sentido, aseguró que "toda actividad –el trabajo y el descanso, la vida familiar y social, el ejercicio de las responsabilidades políticas, culturales y económicas–, toda actividad, sea pequeña, sea grande, si es vivida en unión con Jesús y con actitud de amor y de servicio, es una ocasión para vivir en plenitud el Bautismo y la santidad evangélica".
El Pontífice dijo estas palabras al reflexionar sobre el pasaje evangélico de este domingo, en el que "Jesús se presenta como la vid verdadera y nos invita a permanecer unidos a Él para poder dar mucho fruto".
"La vid es una planta que forma una cosa sola con los sarmientos; y los sarmientos son fecundos solamente en cuanto están unidos a la vid. Esta relación es el secreto de la vida cristiana y el evangelista Juan la expresa con el verbo 'permanecer', que en el pasaje de hoy se repite siete veces", explicó a los 30 mil fieles reunidos en la Plaza de San Pedro. "Permanecer en mí, dice el Señor; permanecer en el Señor", alentó el Papa.
Francisco dijo que "se trata de permanecer en el Señor para encontrar el valor de salir de nosotros mismos, de nuestras comodidades, de nuestros espacios restringidos y protegidos, para adentrarnos en el mar abierto de las necesidades de los demás y dar amplio respiro a nuestro testimonio cristiano en el mundo".