Portavoz del MCL exige a Díaz-Canel reconocer derechos para recién hablar de cambios en Cuba

"Todos sabemos que los cambios de apellidos no significan cambios que garanticen los derechos de las personas, los hechos lo demuestran y no podemos olvidar las lecciones de la historia", indicó.

En ese sentido, recordó la dictadura de Rafael Trujillo en República Dominicana entre 1930 y 1961, cuando fue asesinado. Durante ese tiempo, para aparentar una imagen democrática hizo postular a otros candidatos para que hicieran de presidentes por ciertos periodos, pero con él detrás ejerciendo el poder.

Asimismo, indicó, está el caso de la "dinastía Somoza en Nicaragua" por más de cuatro décadas, el chavismo en Venezuela o el caso de Vladimir Putin como presidente de Rusia en periodos consecutivos de 2000-2004, 2004-2008; 2012-2018 y su reciente reelección.

Para el periodo 2008-2012 Putin impulsó la candidatura de Dmitri Medvédev, y ejerció el cargo de primer ministro.

En el caso de Cuba, señaló que lo que se conoció como "revolución" pronto "no fue más que una sangría de gansters que se arroparon con una ideología que les permitiera navegar en medio del conflicto de las potencias antagónicas" de entonces, en referencia a Estados Unidos y la Unión Soviética.

Recordó que luego de la caída de la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1959), se instaló "un gobierno del que pronto fueron echados los elementos demócratas como el presidente Manuel Urrutia en 1959, a solo seis meses de ser proclamado por un acuerdo de grupos opositores".

"Luego fue nombrado por Fidel Castro y mantenido como ficha decorativa en el cargo de presidente el doctor Osvaldo Dorticos (julio 1959 - diciembre 1976), hasta que fue defenestrado y se suicidara" en junio de 1983.

El portavoz del MCL dijo que "lo verdaderamente democrático, lo que en verdad representaría un cambio real, no un cambio fraude, sería que se respetara la soberanía popular, se reconozca y garantice en la ley el derecho de los cubanos a elegir y ser elegidos, que todos los exiliados podamos regresar a nuestro propio país, que se legalicen todos los partidos políticos, que se respete y potencien las iniciativas individuales que fomentan el desarrollo económico de nuestro país". 

"Cuando todo esto pase, o al menos el régimen demuestre voluntad para iniciar de la ley a la ley el proceso de cambios hacia la democracia, entonces podremos pensar que algo comienza a deshelarse", indicó Iglesias, exprisionero de conciencia de la Primavera Negra de 2003 y exiliado en España desde 2010.

En ese sentido, el portavoz del movimiento fundado por Oswaldo Payá dijo que sigue esperando la respuesta a "la demanda de referendo sobre el Proyecto Varela, para que se reconozcan y garanticen nuestros derechos"; una iniciativa "apoyada por más de 35.000 ciudadanos cubanos".

Miguel Díaz-Canel

Sobre el nuevo presidente de Cuba, de 58 años de edad, Regis Iglesias dijo que "tengo entendido que ha sido un elemento cercano a Raúl Castro, que ha sobrevivido las purgas estos años y esto supone un grado de complicidad con la casta en el poder".

En Cuba, señaló, "la propaganda oficial solo ha divulgado la versión edulcorada de la vida de Fidel y Raúl Castro. El resto de funcionarios parece como si hubieran salido de una cadena de producción, y en dependencia de las necesidades del régimen pueden ser declarados defectuosos y hechos a un lado o mantenerse como diente en el engranaje que ha sometido al pueblo por 60 años".

"Qué papel hará Díaz-Canel, eso lo sabe él. A nosotros nos toca recordarle que la legitimidad de los representantes públicos nace de la voluntad popular respetada y garantizada por las leyes, y los cubanos queremos poder decidir nuestro presente y nuestro futuro soberanamente, ya estamos cansados de imposiciones desde el poder". "Basta ya de tiranía, es la hora de la libertad, no del continuismo", expresó.