MADRID,
La banda terrorista ETA envió hoy viernes 20 de abril un comunicado en el que piden perdón "a ciudadanos y ciudadanas sin responsabilidad alguna en el conflicto" y ha reconocido "el daño causado en el transcurso de su trayectoria armada".
En relación con este comunicado, el portavoz de la Conferencia Episcopal Española, el sacerdote José María Gil Tamayo, aseguró que da "gracias a Dios que de una vez esta pesadilla horrible de sangre y horror" ha terminado.
"Queremos felicitarnos porque ha sido la victoria de la democracia del pueblo español, la que quería acabar con esta lacra y sufrimiento", afirmó e insistió en que "es una buena noticia y un día para dar gracias a Dios y pedir que haya una reconciliación efectiva y cohesión".
El vocero hizo un recuerdo especial a las víctimas y sus familias y aseguró que "ven este día de una manera especial", el sacerdote mostró su "cercanía al sufrimiento que no termina con una declaración de que ha acabado esta pesadilla y este dolor".
En el año 2011 ETA cesó la actividad armada y su disolución definitiva está prevista para el inicio del mes de mayo.
En ese sentido, el P. Gil Tamayo aseguró que desea que esta futura disolución "contribuya a la gran tarea que queda, que es la reconciliación que es el trabajo más difícil, más costoso, que lleva más tiempo y que exige más generosidad".