VATICANO,
El entrenador de basketball de la Universidad Villanova en Estados Unidos, Jay Wright, obsequió una pelota naranja autografiada por los miembros del equipo ganador del campeonato nacional masculino 2018.
Las imágenes muestran al Pontífice sonriendo. Si bien, es conocida la afición del Papa Francisco al fútbol, especialmente del Club Atlético San Lorenzo de Almagro de Argentina, el Santo Padre jugaba al basketball.
En abril de 2015, en declaraciones al portal deportivo argentino TyC Sports, el Santo Padre reveló que era un "patadura", es decir, no muy bueno para el fútbol y que "más bien jugaba al básquet".
El sábado 14 de abril de este año, en una audiencia privada, el entrenador del equipo de la Universidad Villanova agradeció al Santo Padre, quien se refirió a las raíces agustinianas de la escuela católica y habló de su obligación de "abordar los complejos desafíos culturales planteados por los cambios de época que afectan a nuestro mundo de hoy", según indica The Inquirer.
Asimismo, el Papa sostuvo que es urgente "el desarrollo de una visión universal y católica de la unidad de nuestra familia humana y un compromiso con la solidaridad práctica necesaria para combatir las graves desigualdades e injusticias que marcan el mundo de hoy".
"Espero que la Universidad de Villanova persevere en sus esfuerzos por comunicar los valores intelectuales, espirituales y morales que permitirán a los jóvenes participar sabia y responsablemente en los grandes debates que configuran el futuro de nuestra sociedad", añadió.