CARACAS,
El Obispo de San Cristóbal (Venezuela), Mons. Mario Maronta, lamentó la muerte del P. José Luis Jaimes González, ocurrida el 5 de abril debido a la escasez de medicinas que padece el país.
"Si Venezuela no viviera esta crisis, el P. José Luis no hubiera muerto en este momento. Él sufrió la misma situación que están viviendo tantas personas del pueblo venezolano. Hay quienes quieren ocultar la realidad, pero ustedes son testigos de cómo un sacerdote es víctima un mal sistema de gobierno", dijo el Obispo durante la Misa de exequias celebrada en la Basílica de San Antonio del Táchira el sábado.
"Los sacerdotes somos pueblo y sufrimos los mismos dolores del pueblo", dijo Mons. Moronta, y relató que la enfermedad crónica del P. Jaimes lo hizo recurrir a un hospital de la ciudad fronteriza de Cúcuta (Colombia) porque no había las medicinas que necesitaba en Venezuela.
El Obispo agradeció las palabras y los gestos de solidaridad de los fieles y pidió a "Dios que toque el corazón de quienes tienen que tomar decisiones por el bien del pueblo venezolano".
El P. José Luis Jaimes nació en San Antonio, Municipio Bolívar, el 21 de mayo de 1971. Fue ordenado sacerdote el 15 de marzo de 1997.
Fue vicario de la parroquia Nuestra Señora de Los Ángeles en La Grita, vicario de la parroquia San Antonio del Táchira, formador del Seminario Santo Tomás de Aquino, y párroco de las parroquias Santísimo Sacramento de Rubio y Nuestra Señora de la Luz en San Antonio del Táchira.