Acapulco ,
El Arzobispo de Acapulco (México), Mons. Leopoldo González González, expresó su dolor y se solidarizó con las familias afectadas luego de la balacera que dejó dos muertos durante las celebraciones de Viernes Santo en su ciudad.
"Dos personas perdieron la vida. Expreso mi dolor y cercanía a su familia. Los disparos no se realizaron en el lugar donde en ese momento se encontraba la procesión del Vía Crucis", aseguró el Prelado en conferencia de prensa este domingo 1 de abril.
El viernes 30 de marzo en la ciudad de Acapulco, estado de Guerrero, el robo de un automóvil de la marca Ford a la misma hora en que se realizaba el Vía Crucis fue lo que desató la balacera entre una banda de criminales y la policía mexicana. Durante el altercado dos de los ladrones perdieron la vida.
Mons. González confirmó que "frente a la comisaría que está en la calle Circunvalación, muy cerca del templo parroquial, se había meditado la primera estación", pero "los disparos se escucharon cuando se iba en la cuarta estación, en otra calle, a unos 400 o 500 metros".
"Tal vez, como me comentaron algunas personas, los disparos no se escucharon tan cerca, pero debido al ambiente que se vive, muchas personas sintieron miedo y, otros, verdadero pánico", dijo Mons. Gonzáles luego de conversar con la comunidad parroquial afectada.
El obispo afirmó que cerca del 80% de los feligreses en la procesión lograron tranquilizarse: "pusieron en el piso las imágenes que llevaban y se sentaron a esperar que las cosas se apaciguaran".