VATICANO,
Durante la homilía de la Misa Crismal que el Papa Francisco celebró en la Basílica de San Pedro del Vaticano este jueves 29 de marzo, Jueves Santo, el Santo Padre pidió sacerdotes cercanos, que sean, como Jesús, predicadores callejeros.
Junto al Obispo de Roma, concelebraron los Cardenales, los Obispos y los Presbíteros presentes en Roma. Durante la Celebración Eucarística, los sacerdotes renovaron las promesas realizadas en el momento de su ordenación y, a continuación, se bendijo el oleo de los enfermos, el oleo de los catecúmenos y el crisma.
El Pontífice explicó en la homilía que Jesús "habría podido perfectamente ser un escriba o un doctor de la ley, pero quiso ser un 'evangelizador', un predicador callejero, el 'portador de alegres noticias' para su pueblo".
"Esta es la gran opción de Dios: el Señor eligió ser alguien cercano a su pueblo. ¡Treinta años de vida oculta! Después comenzará a predicar".
Señaló que "la cercanía es más que el nombre de una virtud particular, es una actitud que involucra a la persona entera, a su modo de vincularse, de estar a la vez en sí mismo y atento al otro".