DENVER,
El jueves 22 de marzo la policía allanó la casa del Obispo de Saginaw, Mons. Joseph Cistone, así como las oficinas de la cancillería diocesana y la rectoría de la catedral, en el estado de Michigan (Estados Unidos), en el marco de una investigación por presuntos abusos cometidos por sacerdotes.
En un comunicado dado a conocer el viernes 23 de marzo, el Obispo afirma: "Entiendo que esta noticia sea estresante y desalentadora para la gran comunidad y especialmente para los fieles católicos".
"Hasta la fecha, la diócesis –indica el comunicado– ha hecho un esfuerzo sincero por cooperar con la ley y lo seguirá haciendo".
CNA –agencia en inglés del Grupo ACI– se contactó con la diócesis de Saginaw pero no recibió respuesta.
Por su parte, el fiscal asistente del condado de Saginaw, Mark Gaertner, dijo a los medios locales que "pese a las declaraciones del obispo (antes del 22 de marzo) que decía que cooperarían plenamente con la ley, no lo han hecho así. Por lo tanto era necesario usar otras herramientas de investigación, incluyendo las órdenes de allanamiento".
Tras las acusaciones por abusos de sacerdotes de la diócesis, dos de ellos han sido suspendidos de su ministerio.