En la Misa del pasado 18 de marzo, el Obispo de Oruro, Bolivia, Mons. Cristóbal Bialasik, invitó a los feligreses a defender el "derecho sagrado e inviolable a la vida", de lo contrario, la cobardía y el silencio podrían ser juzgados por Dios.
"Su vida (la del bebé) tiene que ver con mi vida. Su vida tiene que ver con mi salvación eterna. Mi cobardía y mi silencio cómplice de hoy, pueden llevarme el día de mañana" en el "juicio de Dios, a que el Señor pregunte también a mí como a Caín: '¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra' (Gn 4, 10)", expresó Mons. Bailasik.
"Como un acto concreto de conversión que nos ayude a vivir la Cuaresma fructuosamente, fijemos nuestra mirada en el 'Niño por Nacer', el más pequeño e indefenso integrante de nuestra sociedad, el más pobre entre los pobres, porque ni voz tiene para defenderse", agregó.
"Fijemos nuestra mirada de amor solidario por él y defendamos su derecho sagrado e inviolable a la vida".
El Obispo de Oruro también alentó a políticos, economistas y comunicadores a hacer "todo cuanto esté dentro de sus posibilidades, para promover una cultura respetuosa, siempre protegiendo la vida humana".
"Que todos, por grande o pequeña que sea nuestra responsabilidad, seamos valientes en nuestra hora de rechazar cualquier intento por legalizar el crimen del aborto en Bolivia y despertemos en los demás, especialmente en los jóvenes y en los esposos, el respeto y la generosa acogida de toda vida humana naciente, viendo en el fruto del vientre materno la admirable obra del Creador".