VATICANO,
Como cada año, la Congregación para las Iglesias Orientales ha realizado un llamado a participar en la Colecta "pro Terra Sancta" que se realiza en el Viernes Santo en favor de los cristianos de Tierra Santa.
La sala de prensa de la Santa Sede difundió un comunicado que detalla la recaudación de la colecta de 2017 y a qué se destinaron los fondos. Las comunidades cristianas que se han beneficiado de la ayuda pertenecen a los territorios de Jerusalén, Palestina, Israel, Jordania, Chipre, Siria, Líbano, Egipto, Etiopía, Eritrea, Turquía, Irán e Irak.
La Custodia de Tierra Santa, organización de la Iglesia que se encarga de la gestión y protección de los Lugares Santos, recibió la mayor parte de la colecta; la Congregación para las Iglesias Orientales también destinó una parte importante a la formación de futuros sacerdotes, apoyo al clero, actividades escolares, educación cultural y subvenciones a las diferentes circunscripciones eclesiásticas de Oriente Medio.
En dicho ejercicio, la Congregación para las Iglesias Orientales recibió 5.531.000 dólares, y 1.423.000 euros.
De esa cantidad se han dedicado 600 mil dólares y 2.236.000 euros a la formación de seminaristas, sacerdotes y religiosas en Roma, así como al mantenimiento de los colegios sacerdotales y religiosos. Además, se ha dedicado 1.472.000 euros al Pontificio Instituto Oriental de Roma, inaugurado hace dos años para acoger a las religiosas de diferentes países orientales.
También se han dedicado 3.130.000 dólares a becas para la actividad escolar en escuelas dependientes de la Diócesis Patriarcal de Jerusalén, la Custodia Franciscana, las Iglesias Orientales de Tierra Santa y los Institutos religiosos.