Damasco,
Mientras el número de víctimas civiles en la sangrienta guerra civil en Siria sigue aumentando, el Cardenal Mario Zenari, Nuncio Apostólico en Siria, dijo que la situación es "el infierno" en la tierra, "especialmente para niños vulnerables".
Zenari, que ha servido como nuncio apostólico desde 2008 y fue creado Cardenal por el Papa Francisco en 2016, habló en un evento del 9 de marzo para el proyecto "Hospitales abiertos", desarrollado por la organización AVSI en 2016 en asociación con la Fundación Gemelli y el Pontificio Consejo Cor Unum sobre la crisis humanitaria en Siria e Iraq.
El proyecto tiene como objetivo proporcionar atención médica a las personas que viven en la pobreza y apoya las actividades de cuatro hospitales sin fines de lucro en Siria.
Refiriéndose a una declaración hecha recientemente por el director regional del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el Cardenal Zenari dijo que Siria es actualmente "uno de los lugares más peligrosos para los niños".
"Es terrible. Siempre digo que es una masacre de inocentes", dijo, y recordó cómo hace unos años, cerca de Damasco, donde se encuentra la nunciatura, conoció a una niña de 10 años a quien le amputaron las dos piernas después de haber sido impactada por la metralla de un proyectil de mortero.
Recordó otra historia de una niña de 15 años que regresaba de la escuela con un amigo, cuando una astilla de una explosión le atravesó la mejilla y le subió por la cabeza, matándola instantáneamente.