BUENOS AIRES,
El 4 de marzo unos 500 chilenos y argentinos participaron de la "Misa por la Paz" a los pies del Cristo del Tromen, ubicado en el paso fronterizo sureño Mamuil Malal, como signo que recuerda la comunión y hermandad entre ambos pueblos.
El encuentro se desarrolla desde el 26 de febrero de 1950, cuando el primer Obispo de Osorno, Mons. Francisco Valdés Subercaseaux, capuchino misionero conocido como "Padre Pancho" en la zona de la Araucanía, bendijo la imagen del Cristo Crucificado.
La Misa, que llevó por lema "Unidos en una Eucaristía sin fronteras", fue presidida por el Obispo de Neuquén (Argentina), Mons. Fernando Croxatto; y concelebrada por el Obispo de Villarrica (Chile), Mons. Francisco Javier Stegmeier; junto a sacerdotes de ambos países.