VATICANO,
Bajo una intensa lluvia, el Papa Francisco se reunió en la tarde de este domingo 25 de febrero con un grupo de niños y jóvenes de catecismo y del grupo de "Oratorio" de la parroquia romana de San Gelasio I Papa, en el barrio de Ponte Mammolo, a los que animó a dejarse guiar por Jesús, "porque Jesús permanece siempre con nosotros, en los tiempos buenos y en los tiempos malos".
El Pontífice comenzó así su visita a esta parroquia de la Diócesis de Roma, de la que es Obispos, acompañado por el Arzobispo Vicario Mons. Angelo de Donatis; el Obispo Auxiliar para sector Norte, Mons. Guerino di Tora; el párroco don Giuseppe Raciti; el Vice-párroco don Alfio Carbonaro; y el colaborador parroquial don Miguel Porres Prieto.
A su llegada, el Santo Padre se reunió con los jóvenes en las instalaciones deportivas de la parroquia. Dos niños de catequesis de Primera Comunión y dos jóvenes del grupo del "Oratorio", que le hicieron algunos regalos.
Uno de ellos le dijo que le esperaban con alegría. Francisco quiso bromear y contestó: "Dicen que me esperaban con alegría. No es verdad, me esperaban con lluvia".
A continuación, firmó un balón de fútbol que le ofrecieron los jóvenes y les preguntó: "¿Desde qué hora estáis esperando aquí? ¿Desde las 14,00? ¡Pero si son las 16,00! ¡Os habéis empapado! Pues gracias, gracias por la paciencia".
"Escuchad esto –continuó el Papa–. La vida se parece a esta tarde. Porque en ocasiones hay sol, pero en otras ocasiones hay nubes, hay lluvia y viene el tiempo feo. Sabed que en la vida hay tiempos buenos y tiempos feos. El cristiano debe ir adelante con valentía en los tiempos buenos y en los tiempos feos. A veces hay tempestades en la vida, pero sigue adelante, Jesús te guía. Y a veces hay momentos luminosos, sigue adelante, Jesús te guía".