VATICANO,
El Papa Francisco condenó el ataque que el pasado 22 de febrero padeció el barrio de Guta Oriental, Damasco, y pidió el fin de la guerra en Siria: "Todo esto es inhumano".
Tras el rezo del Ángelus este domingo 25 de febrero en el Vaticano, el Santo Padre dirigió unas breves palabras de solidaridad con la población siria afectada por los bombardeos: "En estos días mi pensamiento se dirige con frecuencia a la amada y martirizada Siria, donde la guerra ha estallado de nuevo, especialmente en Guta Oriental".
El Papa lamentó que "este mes de febrero ha sido uno de los más violentos en siete años de conflicto: cientos, miles de víctimas civiles, niños, mujeres, ancianos… Los hospitales han sufrido ataques, la gente no puede conseguir comida… ¡Todo esto es inhumano!", insistió.
Además, advirtió que "no se puede combatir el mal con otro mal. Y la guerra es un mal. Por lo tanto, dirijo un llamado encarecido para el fin inmediato de la violencia, para que se permita el acceso de la ayuda humanitaria con comida y medicinas, y que se pueda evacuar a los heridos y a los enfermos".
El jueves 22 de febrero el ejército sirio lanzó un ataque indiscriminado contra el barrio de Guta Oriental, a las afueras de Damasco, controlado por fuerzas rebeldes contrarias al régimen del Presidente Bacher Al-Asad.
Según fuentes de las organizaciones humanitarias que trabajan en la zona, en el ataque, que duró casi dos días, han fallecido 250 personas, y 400.000 han quedado atrapadas en la zona sin atención médica y sin acceso a alimentos y medicinas.