La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés) exhortó a los fieles a llamar por teléfono a los congresistas el lunes 26 de febrero y exigirles así una solución legislativa para los "dreamers".
Los prelados expresaron en un comunicado del 19 de febrero que están "profundamente decepcionados porque el Senado" no logró un acuerdo para proteger a los "dreamers" (soñadores), los cientos de miles de jóvenes indocumentados que llegaron al país siendo niños.
El plazo para una solución legislativa concluye el próximo 5 de marzo, luego que el presidente Donald Trump decidiera poner fin al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés).
El texto firmado por el Presidente y Vicepresidente de la USCCB, Cardenal Daniel DiNardo y Mons. José Gomez, respectivamente, solicita "una vez más que los miembros del Congreso muestren el liderazgo necesario para encontrar una solución humana y justa para estos jóvenes, que se enfrentan a la ansiedad y la incertidumbre cotidianamente".
"Anunciamos también un Día Nacional Católico de Llamadas para Proteger a los Dreamers. Este fin de semana le pediremos a los fieles de todo el país que llamen a los miembros del congreso el lunes 26 de febrero para proteger a los dreamers de la deportación, para que les den un camino hacia la ciudadanía y eviten cualquier daño a las protecciones existentes para las familias y los menores no acompañados en este proceso", prosigue el comunicado.
Los obispos estadounidenses resaltaron que "nuestra fe nos obliga a estar con los vulnerables, incluyendo nuestros hermanos y hermanas inmigrantes".