Damasco,
El clima de guerra en Damasco, Siria, se mantiene con frecuentes ataques contra la comunidad cristiana, así confirma la religiosa portuguesa Irmã Myri, que vive en el monasterio de Santiago Mutilado en Qara.
La religiosa, cuyo nombre de bautismo es María Lucía Ferreira, pertenece a la Congregación de las Monjas de la Unidad de Antioquía y envió un mensaje a la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) para Portugal, que informó de la situación dramática aún se vive en Siria.
Según Irmã Myri, los combates "inciden sobre barrios habitados por cristianos" en Damasco y son el resultado del esfuerzo del ejército sirio para liberar por completo la región de las milicias armadas.
"La situación en la región de Damasco no es muy buena, porque el gobierno ha intentado avanzar sobre las áreas aún bajo el control del ISIS (el autoproclamado Estado Islámico) o de otras milicias", lamentó.
La religiosa explicó que, ante el avance de las fuerzas del gobierno, "los yihadistas lanzan misiles y bombardeos sobre los diversos barrios" en la capital siria, lo que, muchas veces, "provoca mártires".
"Pero, de vez en cuando, hay milagros", subrayó.