BERLÍN,
El Cardenal alemán Paul Josef Cordes, Presidente Emérito del Pontificio Consejo Cor Unum, afirmó que la pretendida bendición de parejas gays alentada por algunos de sus compatriotas obispos, es algo "sacrílego".
En un comentario publicado el 7 de febrero en el sitio web austríaco Kath.net, el Purpurado respondió al Cardenal Reinhard Marx, Presidente de la Conferencia Episcopal de Alemania, que días antes dijo a la radio Bavarian State Broadcasting que "no puede haber reglas" sobre el tema y que "sí" es posible bendecir parejas homosexuales, una decisión que debe estar en manos de "un sacerdote o un agente de pastoral".
En su comentario, el Cardenal Cordes cuestiona: "¿Una bendición eclesial como confirmación de una relación que es contraria a la voluntad de Dios? Eso realmente es sacrílego".
"Cualquiera que reflexione sobre esto un momento descubrirá la verdadera intención de aquellos preocupados" por las uniones homosexuales. "En este caso, las personas no quieren recibir la asistencia de Dios sino que buscan, con su pedido, el reconocimiento y la aceptación de su estilo de vida homosexual así como su valoración eclesial", prosigue el Cardenal Cordes.
En su opinión, "la iniciativa del Cardenal Marx ignora la clara revelación de Dios" ya que "la Iglesia en su cuidado pastoral une las Sagradas Escrituras con su interpretación a través del Magisterio de la Iglesia".
Además, lamenta, el Cardenal "Marx ni siquiera menciona que la homosexualidad siempre contradice la voluntad de Dios" y que la idea de bendecir a las parejas homosexuales es "atemorizantemente ingenua".