BUENOS AIRES,
"Dios no quita el sufrimiento, sino que le da sentido; Dios no quita la cruz, da fuerzas para que se la pueda enfrentar, vivir y ofrecer", afirmó el Obispo de Avellaneda -Lanús (Argentina), Mons. Rubén Frassia.
Así lo indicó en su programa "Compartiendo el Evangelio", emitido el domingo 4 de febrero por distintas emisoras de la provincia de Buenos Aires, donde reflexionó sobre el pasaje que narra cuando Jesús cura a la suegra de Simón Pedro.
Estando Jesús en la casa de Pedro le dicen que la suegra del pescador está enferma y le piden que la cure. Luego, "sabiendo que Él estaba allí, se le acercaron muchos enfermos pero no curó a todos".
"¿Esto qué significa?, ¿que fue justo con unos e injusto con otros?", cuestionó Mons. Frassia.
Y respondió: "El misterio de la voluntad divina, es un misterio que alcanza a todos pero que tiene efectos distintos, resultados externos distintos; algunas personas que se sanan y otras que siguen enfermas".
Sin embargo, "lo principal es lo que Dios hace en cada uno, provocando un cambio de calidad de vida y de relación", destacó.